CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Individuos armados balearon la sede del periódico El Debate, ubicado en la capital de Sinaloa en el noroeste de México, en una nueva escalada de la violencia en este estado azotado por la lucha entre facciones del Cártel de Sinaloa desatada tras la detención de dos de sus líderes hace más de dos meses.
Según informó el viernes el diario, los atacantes llegaron el jueves casi a medianoche al periódico en la ciudad de Culiacán en dos vehículos, un individuo con un arma larga se bajó de uno de ellos y disparó al menos en 12 ocasiones contra la fachada del edificio antes de darse a la fuga.
No hubo heridos pero tres vehículos fueron impactados por las balas.
“Este acto de violencia es un atentado directo contra la libertad de prensa y el derecho de la sociedad a estar informada”, denunció el viernes la Alianza de Medios Mx, un grupo de defensa de la prensa. “Es inaceptable que el ejercicio periodístico sea vulnerado en nuestro país sin consecuencias claras para los agresores”.
La presidenta Claudia Sheinbaum condenó lo sucedido y dijo que ya se investigaba el tema pero tanto el gobierno federal como el estatal, ambos del partido Morena, han minimizado la violencia de los últimos meses.
En septiembre, un mando militar de Sinaloa dijo que detener la violencia en ese estado no depende de las fuerzas de seguridad sino de que los grupos criminales dejen de enfrentarse. Ese mismo mes la policía municipal de Culiacán fue desarmada, algo que se ha hecho en otras ocasiones en diversos lugares cuando el ejército sospecha que los policías trabajan para el crimen organizado.
Aunque el gobernador Rubén Rocha condenó el ataque el viernes y anunció “una investigación inmediata” de los hechos, siguió minimizando la situación en el estado.
La víspera en un encuentro con la prensa dijo que la capital estaba “tranquila” aunque en las redes proliferaban videos de vehículos en llamas y convoyes de los cárteles atravesando las calles a toda velocidad.
“No hay por qué preocuparse ahora”, indicó Rocha. “Los hechos que han ocurrido han estado fuera y más bien han tenido que ver con civiles enfrentando a la autoridad”, agregó tras asegurar que todo está “controlado”.
Horas después, El Debate era baleado.
Las amenazas contra periodistas y sus fuentes son algo habitual en Sinaloa pero han aumentado exponencialmente desde que estalló la última ronda de enfrentamientos después de que dos capos del cártel, Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, volaran a Estados Unidos y fueran detenidos allí el 25 de julio.
Zambada afirmó haber sido secuestrado por Guzmán López —hijo del exlíder del Cártel, Joaquín “El Chapo” Guzmán— y obligado a subir al avión, lo que provocó una violenta batalla entre la facción de “El Mayo” y el grupo dirigido por los hijos de “El Chapo”, ahora cumpliendo cadena perpetua en Estados Unidos.