No recuerdo exactamente en qué año fue, solo recuerdo que tenía como 10 años cuando escuché por primera vez en Stereo 91 un programa dedicado especialmente a José Alfredo Jiménez, quien con el paso del tiempo se convertiría en mi máximo ídolo musical. Previamente ya había escuchado su música, pues en aquellos años de mi infancia se proyectaba a través de la frecuencia del 1560 de AM un programa llamado “Cuatro Estrellas en el Cielo” que estaba dedicado a los cuatro mejores cantantes de música ranchera como lo fueron, lo han sido, y lo siguen siendo, Pedro Infante, Jorge Negrete, Javier Solís y José Alfredo Jiménez.
Siempre evoco aquella vieja canción con la que empezaba el programa y que decía “ya tenemos cuatro estrellas en el cielo, son Javier, Pedro, Jorge y José Alfredo”… cantada por otro grande, Cornelio Reyna. Aparte mi señora madre, Doña Teresa Contreras, gustaba escuchar canciones del ídolo, ya fueran entonadas por él mismo, o por sus múltiples intérpretes. E indudablemente por todo eso me convertí, como miles más, en seguidor del guanajuatense.
He escuchado a infinidad de cantantes entonar sus canciones, que dicho sea de paso son demasiadas, pues fue un gran autor, y de ahí el dilema si fue mejor autor que cantante. De José Alfredo se ha dicho que no tenía buena voz, y tal vez haya sido así, pero lo que sí tenía era un enorme sentimiento para dejar escapar de su ronca voz sus enormes melodías. Eso fue lo que lo hizo diferente, eso fue lo que lo hizo un grande. Con el paso del tiempo se me hizo frecuente escuchar el programa especial dedicado a José Alfredo, que Stereo 91 transmite una vez al año, de manera ininterrumpida desde 1974, siempre el viernes previo al aniversario luctuoso del nativo de Dolores Hidalgo, quien murió un 23 de noviembre de 1973.
En los últimos años se ha hecho una costumbre en mi casa sintonizar el programa, pues a mi esposa Amparo también le gusta la música de José Alfredo. En mi particular punto de vista el programa es muy ameno bajo la conducción del buen amigo Xico Sepúlveda con el apoyo de la estimada Nora Hinojosa García, quien sigue alternando su labor en el micrófono con su trabajo como integrante del cuerpo edilicio de Nuevo Laredo. Y así lo ha sido a lo largo de su época, con otros conductores que igualmente le han puesto su toque personal.
Cada año el programa es diferente, pues aunque la historia musical de José Alfredo sigue siendo la misma, nunca falta alguna anécdota nueva o algo que lo siga haciendo diferente, de ahí la magia de este programa.
En esta ocasión salió a relucir que uno de los mejores programas que se han hecho fue cuando se tuvo la entrevista con Juan Gabriel, otro gran ídolo ya desaparecido. Pero de la misma forma se ha tenido la participación de muchos otros artistas que convivieron con el bien llamado ídolo del pueblo, y que han descrito sus experiencias.
Ni que decir de la participación de José Alfredo Jiménez Medel, hijo del cantautor, quien también ha participado en varias ocasiones en el programa. En lo personal agradezco a Don Noé Cuéllar González, concesionario de Stereo 91, que siga realizando este homenaje al gran José Alfredo Jiménez, así como a todos los que hacen posible, con su colaboración, este gran programa, que dicho sea de paso es el único en todo México donde se recuerda año con año, en este caso desde 43 años de manera ininterrumpida, al más grande compositor que ha tenido México, el hombre que como dijo Nora Hinojosa en esta última edición, llegó de un MUNDO RARO, para convertirse en su YO, y cantarle a ELLA, y con el tiempo convertirse en el REY y en el ocaso de su vida todavía darnos las GRACIAS por haberlo escuchado.
