Tras el mensaje político de Enrique Peña Nieto, con motivo de su Quinto Informe de Gobierno como presidente de México, un hecho que queda incuestionable es que a partir de este año en realidad compiten las diferentes marcas de gasolinas en el mercado mexicano, o mejor dicho para ser más correctos, distintas franquicias internacionales para Estaciones de Servicio, algo que sin duda ya está beneficiando a los consumidores y a los empresarios del país.
La apertura del mercado gasolinero está atrayendo a México nuevos competidores extranjeros tales como Tesoro, BP, Costco, Gulf, desde esta semana se sumó Chevron y para este martes inaugura Shell, sin olvidar que ya están enfilados ExxonMobil, además de Glencore, entre otras. La apertura comercial que brinda la reforma energética fue la puerta de entrada a un mercado con alto potencial de crecimiento, dado que para 2016 en el país existían once mil 431 Estaciones de Servicio administradas bajo el esquema monopólico de franquicias impuesto por Petróleos Mexicanos (PEMEX), concentrándose 22 por ciento en el Estado de México, Jalisco, así como en Veracruz; que de acuerdo a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) en los siguientes cinco años se duplicará la cifra sumando otras 12 mil gasolineras, con una inversión estimada en 12 mil millones de dólares ¿Nada mal, verdad?
En muchos sentidos, el nuevo paradigma energético mexicano está empezando a percibirse como un gana-gana -guste o no para los opositores de la reforma más importante en materia económica de este sexenio-, incluso hasta para ampliar el panorama de oportunidades para hacer negocios que antes era imposible pensarlos para la realidad en México. Tan solo la construcción de más de 12 mil nuevas gasolineras traerá consigo una derrama muy importante para la proveeduría local, además de incrementar el ‘know how’ de gran valía para detonar más empleos; por ejemplo, esta semana tuve la oportunidad de hacer un largo recorrido con un joven arquitecto –egresado apenas el año pasado- que está encargado de la construcción de 12 nuevas Estaciones de Servicio de carácter privado, una nueva modalidad que resulta muy interesante, pues un grupo de empresarios –entre ellos transportistas- crearon una compañía gasolinera para vender el hidrocarburo a sus propias organizaciones, con este modelo sacan los puntos de abastecimiento de sus patios para mayor seguridad, los instalan en puntos intermedios de interés para ellos pero solo les venderá el combustible a sus vehículos.
Como lo informé en tiempo real en mi sitio www.daviddorantes.mx, esta semana empezaron las operaciones en Hermosillo, Sonora, de la gasolinera Chevron donde ofrecen su más posicionado producto: Techron. Mientras que en Baja California entró la marca de Estados Unidos, ARCO, por lo que pronto ofrecerá la primera gasolina que no es de PEMEX: Tesoro; transportándola por los poliductos de PEMEX en los ramales Rosarito-Mexicali, Rosarito-Ensenada, Guaymas-Hermosillo y Guaymas-Ciudad Obregón.
México hoy cuenta con 15 franquicias diferentes de Estaciones de Servicio, para el año entrante contará por lo menos con dos marcas de gasolinas distintas a PEMEX, ganando empresarios y consumidores. ¿Usted qué opina? www.daviddorantes.mx
