NUEVO LAREDO, TAM.-. Enfermera y paramédico, conocimientos que le permiten cooperar con su trabajo hacia las personas menos favorecidas.
Desde que conoció al pastor de Barrios para Cristo, supo que ahí encontraría un trabajo maravilloso que era cooperar con la gente, comentó Deymi Chamizo Capote, originaria de Camagüey en Cuba.
“MI viaje inicia el 28 de octubre del año anterior, cuando viajé en avión a Guyana, lugar donde hay libre visado, de ahí viaje hacia Venezuela lugar donde llegue el 5 de noviembre y de ahí empieza al trayecto para llegar hasta México, primero durante tres días en una travesía por el Río Amazonas en lancha”, añadió.
Después de ahí salieron con destino a Colombia, fueron siete días los que tuvieron que caminar a través de la selva, luego otros países, hasta llegar a Tapachula, Chiapas ya en México el 26 de diciembre.
Desafortunadamente para ellos, las oficinas de migración permanecían cerradas por vacaciones, esto les impidió realizar cualquier trámite, comentó Chamizo Capote.
“Finalmente abren migración el 9 de enero y después de realizar el trámite llego a Nuevo Laredo el 14 de enero, ya la ley estaba derogada, mi sueño de alcanzar a mis hijos pareció haber terminado, pero ahora buscare regularizar mi situación migratoria aquí en México, pero a Cuba no regreso”, enfatizó.
El trato de la gente de esta ciudad ha sido increíble, comida, ropa, cobijas siempre han recibido ayuda, incluso cuando el 28 de enero fueron asaltados en un hotel, llamaron a las autoridades y llego el pastor de Barrios para Cristo, ahí comenzó este trabajo de ayuda a la gente, que es maravilloso.