NUEVO LAREDO, TAM.-Disfrutar en compañía de toda la familia o amigos la tradicional Rosca de Reyes, resulta una de las mejores experiencias que cierran con broche de oro las fiestas representativas de la Navidad, aseguró el padre Armando Arizola, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Luz.
Explicó que la Rosca de Reyes que se festeja el 6 de enero representa una corona, la cual se adorna con frutos secos y cristalizados de colores simulando las joyas que estaban incrustadas en las coronas de los Santos Reyes que significan Paz, Amor y Felicidad.
“El niño que se esconde recuerda el momento cuando José y María escondieron al niño Jesús para salvarlo de Herodes, la rosca de reyes no tiene ningún signo litúrgico, pero se ha ido mezclando en las costumbre de los fieles, significando la búsqueda del niño Dios”, comentó.
El muñeco escondido dentro de la rosca simboliza al Niño Jesús que los reyes no encontraban porque la estrella desaparecía.
“La tradición dice que quien encuentre al niño en el pedazo de rosca, será quien lo cuide hasta el 2 de febrero, lo vestirá y lo presentará al templo, como lo presentó la Virgen María”, subrayó.
El sacerdote, mencionó que esta tradición se ha ido arraigando entre las personas, porque lo toman como un convivió familiar.