El resultado de las elecciones para renovar al Congreso de Tamaulipas, favorece al PAN, refrenda su mayoría legislativa con un proyecto que mostró madurez, iniciativa y contenido de la estructura consolidándose como la primera fuerza política de Tamaulipas.
Muy lejos quedó MORENA del primer lugar y una serie de lecciones, lecturas que valdría la pena analizar.
Está cerca apenas en tres distritos.
FRANCISCO ELIZONDO se sacó la espina calvada en el 2018, sacó la casta, organizó bien la estructura y más.
En números duros no oficales, el PAN ganó 21 distritos y MORENA 1.
El PRI ninguno.
PRD, PT y Partido Verde no alcanzaron el mínimo del tres por ciento de la votación, perderán sus registros.
Movimiento Ciudadano fue la sorpresa.
Los candidatos a diputados tuvieron su primera experiencia, están convocados a un segundo intento, los veremos en las boletas de las próximas elecciones
Los 36 diputados por votación directa y plurinominales, 22 los tendrá el PAN, ( uno de representación proporcional), 10 serán para MORENA ( 1 de mayoría, y 9 de representación).
El PRI redujo su presencia solamente a tres curules plurinominales, YAHLEEL ABDALA CARMONA, de Nuevo Laredo, OLGA GARZA es regidora de Reynosa y TINO SAENZ de Mante.
Se perdió el priismo de abolengo, de apellidos reconocidos.
No alcanza lugar CARLOS MORRIS y ALEJANDRA CARDENAS.
Resulta un hecho inédito el abstencionismo, nunca en alguna elección había tan poca participación ciudadana, solamente el 30% del electorado salió a votar. Lamentablemente.
Analizando perdedores y ganadores. Los grandes perdedores serán RICARDO MONREAL.
Hay que escribirlo, esta campaña estuvo más vigilada, los topes de campaña tuvieron buen cuidado los candidatos del gasto, por lo que fue una campaña de territorio básicamente.
La ciudadanía optó por los candidatos del PAN.
Concluyo con una frase de una amiga panista de hueso colorado. Tamaulipas se viste de azul, como el cielo.
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