Otra crisis que se espera para el gobierno de la cuarta transformación es en la frontera sur con los países de la llamada región del Triángulo del Norte de Centroamérica, Guatemala, El Salvador y Honduras por las medidas adoptadas por el gobierno mexicano tendiente a cumplir con el compromiso de frenar la migración ilegal.
Está provocando mayor tensión cuando coloca en una situación de vulnerabilidad a la migración, atentando contra los derechos humanos, cambia el discurso del Presidente de México.
La situación es vista con preocupación, están los ojos del mundo sobre México, se podrían frenar las inversiones y será un desafío para los gobiernos centroamericanos.
De Honduras las estadísticas señalan que pueden salir 100 mil anualmente y son deportados 70 mil.
El objetivo de los jóvenes es que al terminar la secundaria emigran, las principales causas de la migración es la pobreza, la violencia y la necesidad de reunificación familiar.
Sea como sea, la intención de llegar a EU no se va a detener, mientras que los gobiernos centroamericanos no destinen opciones reales de progreso para la población.
Es una buena intención la iniciativa del gobierno mexicano para implementar un plan de desarrollo integral para El Salvador, Guatemala, Honduras y el sur de México, de acuerdo a un diagnóstico de oportunidades y recomendaciones a la CEPAL), pero mientras eso no se concrete, no se para la migración.
La población de Honduras en su último censo reflejó poco más de ocho millones de personas.
En Guatemala no existe control de su frontera, la decisión de México de colaborar con Estados Unidos para frenar la migración de centroamericanos generará mayores violaciones a los derechos humanos.
Guatemala tiene una población de 16 millones de personas.
En El Salvador se vive una situación inestable, con la migración puesta en la lupa de acción criminal va a ser más difícil el entorno social de la región.
La pregunta que se hacen los gobiernos centroamericanos es que si a México no le gusta que traten mal a los migrantes mexicanos, entonces a Centroamérica supongo que no le gustará que las autoridades mexicanas traten mal a quienes deciden dejar sus hogares en la búsqueda de mejores oportunidades.
Visto en perspectiva, la nueva política migratoria de México podría propiciar más muertes, más venta de seres humanos para la trata y la explotación sexual, laboral, se va a reactivar el negocio de la venta de órganos? Y quién va a responder ¿Estados Unidos?, como Pilatos se lava las manos y que México se queda ahí siendo cuestionado, respondió un líder del clero.
“Ni Trump ni López Obrador, ni ninguno de los países van a lograr detener el flujo migratorio sin políticas serias, profundas, que realmente ayude a un arraigo verdadero de las personas”.
El Salvador tiene una población de 6 millones de personas.
En resumen, es inexplicable que siendo países con muy poca población estén sufriendo a causa de malos gobiernos que no han sabido encauzar políticas públicas, tiene más habitantes la zona conurbada de Nuevo León o de Jalisco.
El tema es de reflexión.
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