Hasta antes de la elección del 2016 en la que el PAN ganó la gubernatura del Estado, el PRI de Tamaulipas era un ejemplo nacional, una referencia de militancia comprometida
A casi tres años de aquel episodio, que replanteó para siempre el contexto político del Estado, el PRI quedó dramáticamente reducido.
Actualmente Gobierna apenas seis municipios de los más pequeños, logrados en la elección del 2018, y a partir de la próxima legislatura estatal sólo tendrá tres posiciones, las tres de representación proporcional porque no alcanzó ninguna de voto directo.
La elección interna del 11 de agosto por la renovación del Comité Ejecutivo Nacional reveló en número las actuales condiciones del partido.
De un padrón superior a los 300 mil militantes, validado por el Instituto Nacional Electoral, apenas 32,399 acudieron a votar. Los otros 270 mil ignoraron el llamado de una campaña que al menos, mediaticamente hizo mucho ruido.
Hay casos como el de Matamoros, cuya estructura era referencia en la entidad, donde apenas se generaron mil 556 votos superando con muy poco a Reynosa con mil 451 sufragios.
Nuevo Laredo resultó con una de las votaciones más copiosas con 5 mil 108 votos mientras que ciudad Madero superó a ciudades más grandes como Reynosa y Matamoros con 2 mil 117 votos.
El PRI de Tamaulipas cumplió sus expectativas mas optimistas al alcanzar el 10 por ciento de la votación.
Esa es la nueva realidad ante la inminente renovación del Comité Directivo Estatal que ya tiene al menos dos abiertos aspirantes.
Lo concluyente, tras la elección del 11 de agosto es que el PRI Tamaulipas está al 10 por ciento.
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