NUEVO LAREDO, TAM.- Una madre de familia y sus tres hijos se salvaron de morir o de intoxicarse, cuando su domicilio se incendió por un corto circuito, minutos después que ellos salieron de la vivienda.
María de Jesús López, de 36 años y sus tres hijos, no podían creer lo sucedido y aunque perdieron todas sus pertenencias, todos están ilesos, debido a que habían salido a una tienda cercana a realizar algunas compras.
Vecinos de la calle Abono cuadra 400, fueron quienes alertaron a las autoridades, sobre el incendio que se registraba en la casa marcada con el número 405.
Al lugar fueron enviados elementos de la Dirección de Protección Civil y Bomberos, quienes al llegar encontraron la vivienda envuelta en llamas.
Los traga-humo procedieron a combatir el fuego, hasta que luego de varios minutos lograron controlarlo.
De la vivienda se sacaron dos tanques de gas butano, que estuvieron a punto de explotar, pero se evitó rociándolos con agua, hasta que paso el riesgo.
Mientras los Bomberos trabajaban en el combate a las llamas, al domicilio llego María de Jesús, quien traía consigo a sus tres hijos.
La mujer dijo que ellos habían salido minutos antes, para dirigirse a una tienda a realizar algunas compras, percatándose del siniestro, hasta que iban regresando. Gracias a que la madre de familia se llevó a sus tres hijos, no hubo ningún afectado.