Uno de los grandes problemas de las redes sociales es el exceso en la difusión de información falsa, resultado de que cualquier persona publica lo que quiere y de que pocos son profesionales de la comunicación.
Una de las más recientes fake news establecía que en Dinamarca quienes reciben ayuda social están impedidas de votar, para que no se sientan presionadas a votar a favor del partido en el poder.
La noticia fue desmentida por la embajada de Dinamarca en Buenos Aires quien señaló que la prohibición sí existió de 1933 a 1961, pero se derogó y de paso precisó que en el 2018, un total de 702 mil 600 personas recibieron ayuda social y pudieron ejercer su voto.
En México los tres niveles de gobierno tienen programas de ayuda social a los grupos más vulnerables. Son ayudas necesarias en un país con desigualdades sociales. Ojala que esto disminuyera en las próximas décadas. Para ello es necesario que la economía crezca, que el ciudadano promedio tenga acceso a ingresos de entre 8 mil a 10 mil pesos semanales, para que tenga menos necesidad de los apoyos sociales. Mientras eso no ocurra, seguirán los programas sociales.
En otro tema, si el lunes el PAN tuvo una conferencia de prensa con sus tres candidatos a diputados, el PRI hizo lo propio este martes, con la diferencia de que de los tres candidatos solo estuvo Baudelia Juárez. Los otros dos llegaron 50 minutos tarde. ¡Qué chulada!
Eso sí, la presidenta del PRI, Mónica García Velázquez rebosa optimismo y asegura que los candidatos van muy bien. De aquí al cierre el partido va a realizar tres foros ciudadanos para que estos puedan expresarse sobre los temas legislativos.
A tres semanas de que concluyan las campañas, el 29 de mayo, los candidatos priistas insisten en un debate, cuya solicitud ya se formalizó ante los órganos electorales.
Como los debates no son obligatorios es casi seguro que no se realicen.
En realidad los ciudadanos prefieren ver un partido de futbol con equipos mexicanos o una pelea de box arreglada donde participe El Canelo.
Quedan tres semanas de campaña en la que los candidatos harían bien en redoblar su trabajo si quieren ganar. O si de plano se sienten perdidos, pues que arrojen la toalla, porque no tiene caso que transmitan falsas esperanzas de triunfo entre familiares y amigos, que de pronto si se la creen de que su familiar o amigo si puede ganar.
Estamos a menos de un mes de la elección y casi todos los que van a ir a votar ya han decidido por quién lo harán. Los indecisos son minoría, a ellos hay que convencer.
