Los partidos han puesto sobre la mesa sus cartas para el actual proceso electoral.
El PAN se la va a jugar con Manuel Canales Bermea, Imelda Sanmiguel Sánchez y Félix García Aguiar; el PRI con Baudelia Juárez García, Horacio Seoane Yeme y Laura Valdez Covarrubias: Morena, Oscar Alarcón Cantú, Diana Cantú y Jaime Alberto Barrera: el MC, Nereo Villarreal Ibarra, Kimberly Sánchez Nieto y Martha Salas; el PRD, Jovita de la Cruz Oceguera, Luz Carlos Martínez Luna y Juan Félix Vivian Garza; y Verde, Rodolfo Garza del Río, Hilda Requena Ruiz y Larissa Gabriela Ramírez Díaz; Octavio Almanza Hernández, como candidato independiente en el Distrito 2.
Del PT nada se sabe.
En este proceso electoral el PAN prácticamente va solo, tiene rivales de poco peso, con un PRI que registró candidatos por mero formulismo y para conservar sus prerrogativas y un Morena que se cuelga de la imagen del Presidente de la República, imagen que en los últimos días se ha empezado a deteriorar.
A Morena los electores le pueden pasar la factura por las promesas incumplidas del Presidente, desde no bajar el precio de la gasolina, el engaño del IVA y el nulo combate a la corrupción y a la impunidad, entre otras cosas. Además enfrenta problemas internos que trascienden al exterior.
El PAN ha ganado las seis últimas elecciones realizadas en Nuevo Laredo, las tres federales del 2012, 2015 y 2018 y las tres locales, de 2013, 2016 y 2018. En el 2015, aclaramos, el PRI ganó la diputación federal por los votos que le dio la ribereña, pero en Nuevo Laredo el PAN le sacó ventaja.